Vestimenta de las deportistas
El equipo de balonmano de playa de Noruega fue multado con 1.764 dólares por parte de la Federación Europea de Balonmano, vestir pantalones cortos en sus partidos y no la parte inferior del vestido de baño en sus encuentros disputados en el los juegos olímpicos de Tokio 2020.
Esta decisión ha sido fuertemente criticada por quienes defienden las razones de las noruegas, que consisten en oponerse a usar prendas de vestir que las sexualiza cuando se encuentran realizando un deporte.
Los deportistas encontraron apoyo, no solo en su federación, sino que la multa generó molestia incluso entre celebridades, por ejemplo, la cantante Pink, quien por cierto se casó hace unos años en Costa Rica, se a pagar la sanción.
Por su parte el columnista del periódico The Washington Post escribió un artículo titulado: Dejen que las atletas usen la ropa que quieran, estamos en el siglo XXI.
Pero el caso de la selección de balonmano de playa de Noruega no es el único, por su parte, las integrantes del equipo de gimnasia femenina de Alemania optaron por usar uniformes que cubren todo el cuerpo en las calificaciones de Tokio 2020. Ellas adujeron que la medida, fue implementada para promover la libertad de elección de las atletas y contrarrestar la ‘sexualización’ del deporte.
Contrario a lo que sucede en el caso del balonmano, la Federación Internacional de Gimnasia, sí aprueba este tipo de vestimenta para sus competidoras.
Las alemanas también destacaron que contaron con el apoyo de su federación a la hora de escoger su vestimenta para Tokio 2020.
¿Estamos frente a la rebelión de la sexualización en las prendas de vestir por parte de las deportistas? Tal vez eso sea demasiado prematuro concluir, pero bueno, todos estos procesos empiezan así, primero unos pocos, hasta que se convierte en una causa de todos.
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