El Soberano se pronunció
Quienes el pasado 6 de febrero, recibieron la confianza de los electores para ir a la Asamblea Legislativa, deben tener presente que la Constitución Política los señala como diputados de la Nación, no de los partidos políticos.
Por lo tanto, desde este primero de mayo hasta 30 de abril del 2026, todos sus compromisos y esfuerzos, primeramente, deberían estar enfocados en legislar para beneficio de las grandes mayorías, facilitar la reactivación de la producción nacional y así recuperar la credibilidad de la ciudadanía en el llamado primer poder de la República, credibilidad tan alicaída en estos últimos tiempos.
Igualmente don José María y don Rodrigo electos para ir al balotaje de abril, de donde saldrá quien asumirá la Presidencia de la República, a partir del próximo ocho de mayo, quiensalga electo también tendrá el gran reto de recuperar la credibilidad de la ciudadanía en el poder Ejecutivo y esto lo logrará si, desde el primer día, enfoca su trabajo en buscar la eficiencia en la gestión administrativa, acabar con los actos de corrupción, facilitar y apoyar el desarrollo de los procesos productivos, para así reactivar la necesaria generación de riqueza; estimulando y apoyando a los distintos agentes económicos privados, sin cuyo concurso es imposible contar con los recursos financieros para luchar contra la pobreza y para poder mejorar el bienestar general de todas las personas.
El desempeño de los futuros diputados y de quienes integren el futuro Consejo de Gobierno en el próximo cuatrienio, tendrá vital y estrategíca importancia para la estabilización y mejoramiento del sistema democrático. Es de gran importancia que las entrantes autoridades tengan un desempeño radicalmente diferente al que tuvieron las salientes. Superar la creencia que el equilibrio de las finanzas públicas se logra a través de seguir pidiendo prestamos y poniendo nuevos tributos, debe ser superado.
Los impuestos inciden directa y negativamente en la calidad de vida de las personas pues les reducen sus capacidades de compra y también los excesivos tributos afecta negativamente a las empresas, pues les reducen sus posibilidades para invertir, al tiempo que les aumenta su estructura de costos, lo que disminuye directamente su competitivdad.
Otro gran reto que tendrán las autoridades que asuman sus cargos a partir de mayo 2022, estará en desarrollar una gran capacidad de escucha, de dialogar entre todos los diferentes agentes y actores de la sociedad, para converger y así lograr los necesarios acuerdos, para neutralizar las amenazas, superar los retos y aprovechar las oportunidades que como sociedad, todos tendremos que enfrentar, asumir y aprovechar los próximos cuatro años.
La tarea por delante para quienes vayan a la Asamblea Legislativa y al Ejecutivo a partir de este próximo mayo, sin la menor duda, será titánica pero si todos los electos tienen claro que Costa Rica necesita, urge, que ellos al realizar sus futuras responsabilidades, su mayor preocupación sea ser parte de las soluciones y no de los problemas, entonces el futuro aunque todavía muy incierto, será halagüeño.
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