¿Cómo habla el pueblo?
Hemos vivido un proceso electoral más. Llama la atención, especialmente, estos últimos comicios nacionales. Muchos se preguntan de qué manera habla el pueblo ante las últimas y anteriores elecciones.
Este pueblo nuestro es de trayectoria pacifista, tendría que estar muy presionado para llegar a perder esa actitud. Toda vez muchos políticos se han equivocado, ante esa manifestación costarricense de tratar de hacerse entender; ante sus situaciones agobiantes, en actitud pacífica, y esos políticos la han confundido con mansedumbre irrelevante. Por varias administraciones han dejado un sabor amargo en el pueblo y eso es lo que justifica el gran abstencionismo que se ha manifestado y al cual se considera como la mayor fuerza política del momento.
Pero ¿Cuál es la causa real de esta actitud? Ya la sabemos y no es irresponsabilidad, sino es una gran decepción…no de la política…sino de la mayoría de los políticos. Este pueblo ha sido testigo de sus grandes desaciertos, de sus grandes corrupciones, y como valiéndose de algunos portillos pueden salir bien librados.
Si hay algo que atente contra la buena salud de un pueblo, de partidos políticos, de una congregación religiosa y hasta de una familia, es tratar de negar, de subestimar, de maquillar, de esconder sus errores, sus pecados…su corrupción. Nunca esta actitud es la acertada. Con el tiempo al ser descubiertas, cobrarán un alto precio.
Una gran mayoría de nuestro pueblo espera de los gobernantes, que sean respetuosos de sus convicciones, de sus tradiciones morales y religiosas. Aunque no comulguen con ellas pero sí que las respeten. Que oigan al pueblo sin esperar que haya marchas de protestas, ni que las mesas de diálogo, sean más bien, un distractor para disimular una actitud que lejos está dispuesta a escuchar el clamor popular.
Pero por ese pueblo pacífico se accede al poder, el que los electores les brindan a los electos en una democracia efectiva, cada cuatro años. Democracia que iguala a todos los ciudadanos por encima de clases sociales, formaciones académicas o cualquier otra consideración, que pudiera pretender rebajar su derecho a participar y elegir.
La cuidadanía con su voto manda claros mensajes a los políticos y espera que lo sepan entender…es el pueblo vía las urnas electorales, el que elige o el que impide llegar a la Asambla Legislativa o al Ejecutivo; también con su proceder el pueblo motiva a los políticos y a sus partidos a que reflexionen sobre sus errores y que los corrijan.
A los electos por los nuevos partidos políticos que están llegando al poder Legislativo y Ejecutivo, respetuosamente les digo que también valoren este mensaje del pueblo, porque reitero…este con su voto, vía las urnas electorales, es quien elige pero también el que impide, negándoles su voto el llegar a la Asamblea Legislativa o al Ejecutivo.
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