Generar confianza

Recientemente, el Centro de Investigación y Estudios Políticos, CIEP, de la Universidad de Costa Rica, reveló un estudio de opinión en el cual se muestra un mayoritario apoyo de la ciudadanía a la democracia. Se indica que el apoyo es generalizado en todos los sectores de la población y que no corresponde a un apoyo exclusivo de algunos grupos sociales.

Es importante que nuestra sociedad, que ha vivido 200 años de vida independiente, siga privilegiando los valores democráticos, pero tenemos que fortalecer nuestro sistema y sentirnos convencidos de esos valores. No podemos quedarnos con que un estudio lo refleje o con la fiesta democrática que vivimos en cada elección.

Ya el Informe Estado de la Nación 2021 señalaba la necesidad de poner atención a una auténtica representación ciudadana, por citar un caso en el cual se debe trabajar en función de fortalecer el sistema democrático.

Por su lado, recientemente la Asamblea Legislativa aprobó, por una importante mayoría, que sus votaciones fueran públicas. Por muchos años esta reforma se discutió como necesaria en aras de la transparencia, un valor que tanto ansiamos demuestre nuestra clase política.

Creemos que este tipo de decisiones, tomadas en el Primer Poder de la República, van en la dirección correcta y nos ayudan a fortalecer la democracia de frente al pueblo, al tiempo que genera confianza en las decisiones que se toman.

Esa confianza se requiere en todos los niveles y es responsabilidad de todos consolidarla, en función de robustecer nuestra democracia ahora que llegamos al mes de setiembre y afloran nuestros sentimientos patrios.

Muy importante es que no nos quedemos con un concepto de democracia. Bien lo señala el Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia en su numeral 407: “Una auténtica democracia no es sólo el resultado de un respeto formal de las reglas, sino que es el fruto de la aceptación convencida de los valores que inspiran los procedimientos democráticos: la dignidad de toda persona humana, el respeto de los derechos del hombre, la asunción del ‘bien común’ como fin y criterio regulador de la vida política”.

En esa línea debemos avanzar en medio de una crisis económica y un elevado costo de la vida que, como lo reveló también el CIEP, es la principal preocupación de los ciudadanos. Costo de la vida que genera hambre y más pobreza.

Generar confianza en nuestro sistema implica una preocupación por estos temas que a diario enfrentan los ciudadanos, para buscarles solución, especialmente desde nuestra clase gobernante. Generar confianza es clave para que podamos sentirnos orgullosos de nuestra democracia y vivir en paz.