Humildad frente a la naturaleza   

Recientes catástrofes en Costa Rica y el resto del mundo además de dejarnos hincados e impotentes frente a eventos como derrumbres, ciclones, huracanes, dantescas erupciones volcánicas, inundaciones, maremotos y terremotos, muestran que somos una especia vulnerable y débil cuando la madre naturaleza hace cambios bruscos arrasando y destruyendo lo que encuentra a su paso.

Parte de esas tragedias en nuestro país han sido las muertes de nueve personas en Cambronero, tras la caída de material montañoso. En otras zonas se han dado grandes desbordes de ríos, caída de carreteras y puentes, lo que ha implicado personas lesionadas fisicamente como emocionalmente. 

A nivel internacional México acaba de sufrir un fuerte terremoto, y el terrible huracán Ian, también está castigando a la Florida en Estados Unidos, donde los daños son incalculables.

Innumerables acontecimientos similares, a lo largo de la historia, indican que nada es permanente. Hoy podemos tener y al otro día no. Sin embargo, lo material más tarde o más temprano se repone.

Lo importante de rescatar con estas experiencias es la vital necesidad de aprender a ser humildes.

Humildes para recibir ayuda cuando es ofrecida tanto material como el abrazo humano y solidario.

Humildad y solidaridad para mandar ayuda a refugios, para quienes lo han perdido todo, apaciguando la emergencia, e idelamente mantenerla hasta donde se pueda.

Humildad y sentido de oportunidad por parte de autoridades correspondientes para darle un mejor y regular mantenimiento a las carreteras y puentes a lo largo del territorio nacional. Ya que en estos eventos es cuando se pone a prueba lo que se ha trabajo en prevención.

Humildad para agradecer a instituciones como Cruz Roja, Comisión Nacional de Emergecias, y Caja Costarricense de Seguro Social, quienes incondicionalmente atienden a las personas en situación de catástrofe.

Al final aceptamos humildemente que todos necesitamos de todos, nadie es más, ni nadie es menos ante la fuerza de la naturaleza.