Dignidad para nuestros agricultores
Hoy 15 de mayo, es para nuestro país una fecha muy significativa, hoy celebramos “El Día del Agricultor”.
Los agricultores son merecedores de que se les celebre, no solo en este día, sino los 365 días del año, porque con su esfuerzo, dedicación y sudor, hacen posible nuestro alimento diario.
Pero más que celebrar y reconocer una labor tan digna que dinamiza el empleo en zonas rurales, debemos como sociedad analizar el ¿Por qué? se ha deteriorado la imagen de nuestro agricultor.
Nos hemos vuelto insensibles a las personas que labran el campo, a pesar de que todos procedemos de ancestros que dignamente se dedicaron a la agricultura. Debemos trabajar como sociedad para dejar de escuchar frases como “hasta aquí, ya no sigo en la agricultura, he perdido mi patrimonio, al no poder competir con importaciones, sin herramientas” ó “hijo estudie otra cosa para que no sufra como yo”
Las actividades agrícolas constituyen el trabajo más digno e importante en la historia de la humanidad, debemos rectificar.
Los Agricultores son valientes, resilientes, superan día a día el desamparo y desprotección, pero no podemos jugarnos el chance, como país, que sigan desapareciendo, por el desincentivo de perder patrimonios y la dignidad, ante las arrolladoras importaciones desde países con bastas herramientas, estímulos y ayudas internas, que no poseemos en Costa Rica.
El reto es que como sociedad nuestros hijos y nietos vean la agricultura como una profesión digna, que permite el desarrollo rural y que merece condiciones iguales a las ofrecidas en zonas centrales del país. Ya es hora de que los gobiernos le den la importancia que merecen y al igual que las Zonas Francas, que son fuertemente incentivadas, debemos hacerlo con nuestra agricultura en zonas fuera del GAM, no basta con instalar maquilas se requieren encadenamientos agropecuarios.
El sector agropecuario posee retos y mejoras aún pendientes. Debemos redoblar esfuerzos para mejorarle el acceso a los agricultores con herramientas tecnológicas que permitan una mayor competitividad, reducción de costos, financiamiento y protección al medio ambiente.
Si un gobierno comprende que invertir en agricultura es una herramienta social y económica que sacaría a muchos de la dependencia de instituciones como el IMAS, el estado y la sociedad ahorraría millones, pero eso es un reto que no se logra fomentando importaciones que desincentivan y desplazan a nuestros agricultores.
Costarricenses, en nuestras acciones diarias podemos ayudar a dignificar a nuestros agricultores, apoyemos su importante labor, dignifiquémoslos y trasmitamos a la sociedad y nuestros hijos, admiración, respeto y apoyo por las labores del campo.
Cada acción individual suma para lograr un cambio y darle el valor que se merecen todos esos hombres y mujeres, que valientemente luchan dignamente, todos los días, por producir lo que nos comemos.
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