Dating deja vu

¿Ha notado que algunas personas buscan parejas que entre ellas son parecidas?

A este tipo de comportamiento le llaman “dating deja vu”, un nuevo concepto que quizá no conoce, pero que seguramente le resulta familiar.

El “dating deja vu”, es  un fenómeno que hace que nos sintamos atraídos por personas con los mismos rasgos de personalidad e incluso físicos. Esto pasa incluso cuando las relaciones con ese tipo de pareja, que puede ver como la ideal, fallan una y otra vez.

La profesora Jessica Maxwell, investigadora y psicóloga social de la Universidad McMaster en Ontario, Canadá, afirmó que el «dating déjà vu» proviene de la suposición arraigada desde hace mucho tiempo de que «todos tenemos un tipo», una teoría que, según ella, está respaldada por muchos estudiosos del tema.

La psicóloga Leslie Becker-Phelps, autora del libro Inseguro en el amor, explicó que generalmente se habla de «dating déjà vu» cuando una persona repite relaciones problemáticas, pero también cuando ha tenido experiencias positivas.

La experta señaló que en psicología se suelen tener pacientes que repiten patrones a lo largo de sus vidas, algo que en el mundo de las citas “es incluso más común”. Ella dice que tendemos a buscar y enamorarnos de personas con rasgos similares porque nos son familiares y nos sentimos cómodos con esa familiaridad.

Ambas psicólogas citan la teoría del apego como una de las principales razones que explican por qué muchos tienden a tropezarse con la misma piedra.

Esta teoría indica que desde pequeños desarrollamos una relación con un cuidador principal, normalmente nuestra madre o padre, que nos marca y que definirá nuestra búsqueda de proximidad en relaciones futuras.

La teoría plantea cuatro tipos principales de apego: seguro, ansioso, evitativo y ambivalente. Hablemos hoy de los dos primeros: Según los psicólogos, desarrollará un apego seguro si su cuidador reacciona de forma apropiada y consistente a sus necesidades de niño, logrando así formar con éxito vínculo paternal estable.

Pero si tiene un padre o cuidador excesivamente protector, intrusivo, negligente o inconsistente, probablemente tendrá un apego inseguro, lo que suele empujar a ciertas personas a terminar en relaciones tóxicas.

Leslie Becker-Phelps, indicó que uno de los primeros pasos para dejar de enamorarse del mismo tipo persona, cuando resulta problemático, es la autoconsciencia y la autocompasión.

Y cerró con esta frase: Si usted es consciente de que está repitiendo un patrón que no le conviene, y lo hace con autocompasión, no culpándose ni haciéndose sentir mal, podrá recapacitar y evitar repetir un mismo error.

Fuente: BBC MUNDO