75 años de la Constitución Política y 40 años de la Ley de Asociaciones Solidaristas
El 7 de noviembre de este año, se cumplen 75 años de la promulgación de nuestra Constitución Política y este mismo día pero hace 40 años se promulgó la Ley 6970 de Asociaciones Solidaristas, impulsada en el gobierno de Luis Alberto Monge Álvarez Dos hechos absolutamente relevantes en la historia patria y para nuestra paz social.
Son muchas las contribuciones que don Luis Alberto, benemérito de la patria, hizo al desarrollo económico, social, político y a la paz social de nuestro país. Todas marcadas por su profunda vocación al diálogo y respeto entre todos, como medio para ubicar encuentros, esto por su visión social-humanista de la sociedad. Sin duda debe destacarse su respeto y apoyo irrestricto a las leyes y a la Constitución; así como su incansable lucha por el mejoramiento de Costa Rica, impulsando y respaldando leyes e iniciativas para promover el desarrollo de movimientos sociales, bases innegables de un modelo de desarrollo más justo, inclusivo y participativo.
Como ciudadano y mandatario respetó nuestra institucionalidad, leyes y la Constitución, por eso don Luis Alberto, reiteradamente, manifestó que era imprescindible darle sustentación jurídica a un movimiento con raíces totalmente costarricenses y con indudable proyección para la estabilidad social y política de nuestro país, como fue el aporte de don Alberto Martén, padre indiscutido del solidarismo y su Plan Martén de Capitalización Laboral, dándole.
Don Luis Alberto nos dejó, para la historia, un relato de su puño y letra de cómo se gestó la Ley 6970 de Asociaciones Solidaristas. Nos dice él en un discurso durante el XV Congreso Nacional Solidarista el 31 de agosto del 2001: “… constituí una comisión con varios ministros y les encargue un inmediato dialogo con dirigentes sindicales y cooperativos con miras a lograr un proyecto de ley que tuviera los menores obstáculos posibles en el … trámite legislativo. Expliqué que el solidarismo era una realidad que no podía ignorarse. Existiría con ley o sin ley” …. “Sugerí que la sanción presidencial se hiciera el 7 de noviembre de 1984. ….. “Recordé que desde hacía varios años festejamos el 7 de noviembre como el Día de la Democracia costarricense; por lo que, la firma se llevó a cabo en el Parque Nacional ese día, con la presencia como orador de don Alberto Martén”.
Y como si fueran hoy sus palabras, frente a un país sumido en la falta de diálogo, confrontado, con preocupante crispación social y con un debilitamiento deliberado de quienes juraron y por lo tanto, están llamados a fortalecer la institucionalidad democrática y el Estado de Derecho. Agregaba don Luis Alberto, “Se está hablando de signos ominosos en el horizonte económico y social de Costa Rica. Si llegaran a concretarse -que Dios no lo quiera- en daño …a los trabajadores y en general al pueblo costarricense la única manera de palear los efectos negativos de una crisis y resurgir después de la tormenta es constituyendo un gran frente solidario nacional que trascienda las fronteras partidistas y que una a todos los sectores nacionales para enfrentar los problemas que amenazan nuestra democracia”. Urge un gran diálogo nacional, respetuoso, tolerante e integral.
Como nación es urgente que abordemos ese desafío-país, de recuperar el respeto a nuestra institucionalidad, leyes y Constitución Política, antes de que sea demasiado tarde. Lo que está de por medio es la anulación de los grandes logros que como sociedad hemos alcanzado, se han agravado los niveles de desigualdad, exclusión, de cohesión pero sobre todo de un diálogo efectivo y respetuoso, todo esto está carcomiendo la confianza de los costarricenses en la cultura y práctica democrática.
¡Y si no hay un alto radical al enfrentamiento actual, que el último apague la luz!
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