Alimentación complementaria: paso fundamental en el desarrollo saludable de los bebés
La alimentación complementaria es un paso fundamental en el desarrollo saludable de los bebés. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Caja Costarricense del Seguro Social, se recomienda que, durante los primeros seis meses de vida, los bebés sean alimentados exclusivamente con leche materna. Este periodo es crucial, ya que la leche materna contiene todos los nutrientes, vitaminas y anticuerpos necesarios para fortalecer el sistema inmunológico y favorecer el crecimiento óptimo.
Respetar esos seis meses sin la introducción de otros alimentos o líquidos asegura una base sólida para el desarrollo del bebé, además de reducir el riesgo de infecciones, enfermedades gastrointestinales y alergias alimentarias. Para las madres, este periodo también tiene beneficios, como la reducción del riesgo de ciertas enfermedades, incluyendo el cáncer de mama y de ovario.
A partir de los seis meses, la introducción gradual de alimentos sólidos se convierte en una necesidad para cubrir las crecientes demandas nutricionales del bebé. En esa fase, los alimentos no reemplazan la leche materna, sino que la complementan. Los primeros alimentos deben ser ricos en hierro y nutrientes esenciales, como papillas de verduras, frutas, cereales fortificados y proteínas blandas. Es importante introducir un solo alimento a la vez para detectar posibles alergias y permitir que el bebé se acostumbre a nuevos sabores y texturas.
Escuchemos a la doctora Maricruz Ramírez Di Lioni, de la Caja Costarricense de Seguro Social.
La doctora Ramírez Di Leoni, añadió que la alimentación complementaria es también una oportunidad para fortalecer el vínculo entre los padres y el niño, pues el acto de alimentar a un bebé es un momento de interacción y aprendizaje mutuo.
Los comentarios están cerrados.