El ajedrez

Hoy se cree que el ajedrez constituye una evolución del juego de mesa llamado shatranj, que proviene, a su vez, del chaturanga, ideado en la India en el siglo Sexto. Los datos históricos señalan que el juego se utilizaba para representar una batalla y de esa manera idear estrategias en el campo.

Un dato interesante es que en la tumba del emperador egipcio Tutankamon,  junto a numerosos objetos que acompañaban a la momia se halló un tablero cuadriculado y piezas con significativa semejanza al ajedrez que conocemos, aunque en menor número.

El ajedrez llegó a Europa en la Edad Moderna con la invasión de los árabes, a la península ibérica en el siglo 8.

Las primeras piezas de ajedrez encontradas en suelo europeo datan del año 900 y fueron encontradas en Peñalba de Santiago, conociéndoselas como «las piezas o bolos de San Genadio».

En esa época la dama no existía, era la alferza la que ocupaba esa casilla con un movimiento mucho más limitado.

Pero fuero presidente en Europa que el tradicional juego experimenta transformaciones paulatinas hasta llegar a ser el ajedrez que hoy conocemos.

Por eso es que las piezas que hoy conocemos tienen esa evocación a la sociedad medieval europea con un rey; una dama; 2 caballos, en representación del caballero; 2 torres y 2 obispos, que sustituyen al elefante como arma de guerra del juego original, aunque en español conserva el nombre de alfil, que precisamente significa elefante en árabe.

En estos días de confinamiento en casa una buena opción para pasar el tiempo y compartir es jugar ajedrez. Le invitamos a hacerlo.