El retorno a los salvavidas
¿Se ha puesto usted a pensar que las escuelas y colegios, más que un sitio de reunión para aprender y convivir, son para muchos menores un salvavidas?
Hay niños y adolescentes a quienes el aula libra de un familiar abusivo, de accidentes ocurridos en el hogar por negligencia y hasta de pasar hambre, gracias a los comedores escolares. De ahí, la importancia del retorno a las clases presenciales.
Datos aportados en noviembre anterior por la Ministra de Niñez y Adolescencia, Gladys Jiménez, indican que para esa fecha el 911 y el PANI, habían atendido 15 mil denuncias por negligencia, 12200 por conflictos familiares, 9400 por agresión física y 4000 por abuso sexual. Y todo esto ocurrió en tiempos de pandemia, en hogares afectados por el confinamiento, el estrés, el desempleo, con personas conviviendo todo el día y la noche en espacios reducidos.
Si hay algo que quedó claro con esta emergencia sanitaria, es el indiscutible el papel que juegan los centros educativos, como los sitios más seguros y de contención; y por supuesto, la importancia de los docentes. Estos profesionales tienen la misión de ser guías, son ellos quienes conocen a cada uno de sus estudiantes, y poseen la capacidad para analizar y abordar las situaciones que se presentan. Además, muchas veces son la única persona en quien un niño o un adolescente confía, y en sus manos está el poder para prevenir, detectar, actuar y de esa manera, cambiar la vida de ese ser que requiere ayuda.
Los educadores de hoy, saben que las aulas frías son cosas del pasado, porque además de conocimientos, de números y teorías, el estudiante necesita un componente emocional: cariño, comprensión, protección.
Señores padres y madres de familia, es cierto que son ustedes los que deben decidir si sus hijos van o no a la escuela, pero antes de hacerlo, les pido que tomen en cuenta dos cosas. En primer lugar, pueden estar absolutamente seguros de que las autoridades del Ministerio de Educación y del centro educativo velarán por el debido cumplimiento de todos los protocolos, a fin de evitar contagios.
Lo otro es que recapaciten sobre el significado que tienen las aulas para sus niños y adolescentes, pues es aquí donde ellos se expresan con más libertad, y donde conviven con sus iguales, personas de la misma edad e intereses similares, factores que son fundamentales para su desarrollo psicosocial.
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