Existe o no la manipulación sindical

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Existe o no la manipulación sindical
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En toda esta negociación de estira y encoge ante la grave crisis, pregunto, ¿Serán los sindicatos capaces de renunciar a sus pluses y privilegios?

Ya todos sabemos de las negociaciones que han hecho algunos sindicatos con el oficialismo, para mantener escandalosos privilegios en las llamadas Convenciones Colectivas.  

Mas ahora que Costa Rica está sumida en la crisis fiscal y déficit financiero, los sindicatos quienes estuvieron en las mezas de dialogo, no fueron capaces de decirle a la ciudadanía –Renunciamos a los pluses, además de no renovar las Convenciones Colectivas, con el fin de no imponer nuevos o más impuestos a la ciudadanía.-.

Su sugerencia fue de gastar las Reservas Internacionales que custodia el Banco Central, pero una vez que estas se acaben, ¿Cómo afrontaríamos el monstruoso gasto público?  

Hoy como siempre, algunos sindicatos manipulan al pueblo exigiéndoles solidaridad en su lucha contra la disminución o supresión de pluses, y contra la actual Reforma del Empleo Público.

Es muy lamentable escuchar que prefieren la creación de nuevos impuestos y que el gobierno recorte el presupuesto de servicios esenciales afectando su funcionamiento, en lugar de eliminar de una santa vez los pluses salariales, que como todos ya sabemos existen instituciones con beneficios realmente escandalosos y abusivos.

En pocas palabras, que sea el sector privado el que sufra por un deterioro del servicio esencial, antes que ellos vean disminuido sus numerosos privilegios.

La base en mi argumento es el artículo 50 de nuestra constitución política, que en sus líneas está escrito, “El Estado procurará el mayor bienestar a todos los habitantes del país, organizando y estimulando la producción y el más adecuado reparto de la riqueza.”, la belleza del artículo es cuando dice “todos, no dice – exclusivo para algunos empleados públicos-.

Es hora de actuar como un país unido, no dividido entre sectores público o privado, es hora de liberar monopolios, de estimular la inversión extranjera, y muy importante que el Elefante Blanco impune y devorador de recursos estatales, pase a ser un pequeño chihuahua.

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