Frente común contra las fiestas intercolegiales
Son un dolor de cabeza, cada vez más difíciles de controlar y cada vez más peligrosas, pues exponen a riesgos a adolescentes y jóvenes. Las fiestas para estudiantes, antes solo se hacían al final del curso; sin embargo, ahora se realizan en cualquier momento del año. Dejaron de ser el festejo de quienes estaban próximos a terminar el quinto o sexto año y ahora, los organizadores invitan a jóvenes de todos los niveles de colegio.
El director del Instituto Costarricense contra las Drogas, Guillermo Araya, hizo la advertencia, “a los narcotraficantes les interesa un público cada vez más joven y si no actuamos todos en conjunto, muy pronto sus tentáculos podrían llegar a las escuelas”.
Redes sociales, centros comerciales, parques, cualquier vía es utilizada por los organizadores para invitar jóvenes a estas fiestas en donde pueden encontrar licor, sexo y drogas. Sí, dejaron de ser un lugar donde los jóvenes tomaban licor y fumaban tabaco, ahora, consumen marihuana, cocaína, drogas sintéticas, como la K 2 y hasta medicamentos de uso ilegal como la ketamina.
El ICD y la Fuerza Pública se han unido para actuar, según ha indicado Araya, la estrategia ahora es la de prevenir, de manera que cuando reciben un aviso de un profesor, padre, estudiante o cualquier persona, sobre una actividad que se está gestando, tratan de frenarla. El año pasado lo lograron en 8 casos y en 4 debieron actuar e interrumpir su desarrollo, este año ya han evitado 22.
Ante esta realidad, el Colegio de Profesionales en Orientación hace un llamado a los padres y madres, quienes son responsables de sus hijos, para que estrechen con ellos la comunicación. Además, los invitan a acercarse a los centros educativos y unirse a esta lucha contra las fiestas que ponen en riesgo a las personas menores de edad y los instan a que más bien se involucren en el desarrollo de actividades acordes con estilos de vida saludables que les permitan a los jóvenes divertirse, recrearse, socializar.
Según el Código de la Niñez y la Adolescencia los progenitores son los responsables de la salud y la seguridad de hijos e hijas, en ese sentido es su obligación interesarse por lo que ellos están haciendo, para ello es necesario fortalecer el vínculo con ellos y sobre todo, establecer límites.
Según la Encuesta Nacional sobre Tráfico de Drogas en educación secundaria del 2015, elaborada por el ICD, un 41% de los y las jóvenes dice que es fácil conseguir drogas en su comunidad y 32 de cada cien, aseguran que también hay facilidad para conseguirlas en el colegio, como ven la situación no es fácil, y requiere el compromiso de cada uno y el cumplir bien el rol que les corresponde en esta lucha: padres y madres, colegio y autoridades.
Carmen Frías
Presidenta Colegio de
Profesionales en Orientación
Los comentarios están cerrados.