Hoy es nuestro día.

Hoy es el gran día, hoy es la gran oportunidad, hoy es el escenario de la vida, porque la vida tiene lugar en el día de hoy.

Pongamos una sonrisa de amor y entusiasmo a todo lo que hoy hagamos, a todo lo que hoy miremos, a todo lo que hoy comuniquemos, a todo lo que hoy escuchemos y a todo lo que hoy pensemos, porque hoy es el presente de nuestra existencia.

La vida es el resultado de lo que hagamos hoy, y no tiene sentido postergar la dicha para mañana, pues todo, absolutamente todo tiene lugar en el presente.  

Hoy es la gran oportunidad para practicar la paz, el optimismo, la alegría, la actitud positiva, el perdón, y de igual manera eliminar las quejas y cultivar la gratitud, extirpar el chisme y llenarnos de empatía, desterrar el temor y despejar el camino que nos conduce a la conquista de nuestros sueños.

Si nuestros pensamientos están encadenados a pasajes amargos del pasado y a la idea de un futuro incierto y nos olvidamos de vivir en el presente, vamos a partir de este maravilloso mundo sin disfrutar la vida.

Solamente tengamos presente que todo lo que hagamos hoy, sea de tal manera, que no comprometa nuestro futuro.

Todo lo que somos es el resultado de lo que hemos pensado y de cómo hemos actuado en el escenario de la vida.

El día de hoy es la gran oportunidad de rectificar el rumbo de todo aquello que nos hace daño y de todo aquello que nos impide transitar por el camino de las virtudes.

No olvidemos que las virtudes son la única vía que nos conduce por el camino de la paz, la prosperidad y la felicidad.  

Practicar las virtudes hasta que estas definan de forma natural nuestra conducta, es la más acertada decisión, es una decisión de sabios que podemos iniciar hoy.

 ¡Recordemos! La felicidad es el resultado de vivir una vida en torno a las virtudes, porque sin virtudes no hay felicidad.

Hoy es la gran oportunidad, hoy es nuestro día, hoy es el escenario de la vida, levantémonos con amor y entusiasmo a saludar este hermoso día.