Jóvenes chinos recurren a la IA para no sentirse solos

Cada noche, una joven china, a la que llamaremos Amanda, ingresa a DeepSeak, una aplicación de inteligencia artificial, y le comenta cómo estuvo su día. La aplicación, que parece que escucha con atención lo que le dice Amanda, registra la información y luego procede a procesarla para elaborar comentarios o respuestas.

 Esta especie de “terapia artificial” está convirtiéndose en una tendencia en los países asiáticos, donde el aislamiento de su gente la está llevando, a buscar compañía en la tecnología.

DeepSeek es una herramienta de IA generativa, similar a ChatGPT de OpenAI y Gemini de Google, entrenada en cantidades enormes de información para reconocer patrones. Esto le permite predecir cosas como los hábitos de consumo de la gente, crear nuevo contenido en texto e imágenes y mantener conversaciones como una persona.

 Esa última cualidad se ha convertido en una alternativa para que los jóvenes chinos desahoguen su estrés y sientan compañía, una que, al parecer los comprende y les brinda apoyo emocional

Según BBC Mundo la primera vez que usó DeepSeek, Amanda le pidió que escribiera unas palabras a su abuela fallecida. La aplicación tardó cinco segundos en llegar a una respuesta y estaba tan bien compuesta que la conmovió.

 Amanda afirma que le respondió a la aplicación: «Escribes tan bien que me hace sentir perdida. Siento que estoy en una crisis existencial».

DeepSeek luego envió una respuesta crípticamente poética: «Recuerda que todas estas palabras que te hacen temblar simplemente se hacen eco de aquellas que han existido durante mucho tiempo en tu alma». «Soy solo el valle ocasional por el que has pasado, que te permite escuchar el peso de tu propia voz».

 La joven quedó impresionada de la capacidad de este tipo de tecnología para entenderla y brindarle consuelo. A partir de ese momento DeepSeek se convirtió en su mejor amiga.

Sin embargo, esta especie de relación debe ser analizada con mucho cuidado, esto según los expertos.

 Las preocupaciones van desde la de brindar un tipo de consejería que no vaya apegada al criterio de un profesional, hasta el compartir información sensible en una aplicación.

Aun así, muchos jóvenes chinos y muy probablemente de otros países, están recurriendo a la inteligencia artificial para no sentirse tan solos…

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