La incomprensible política energética en nuestro país

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La incomprensible política energética en nuestro país
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Hace unas semanas la distribuidora nacional de combustibles, Recope, hacía un paralelismo de cómo el aumento en las ventas de sus productos son un reflejo del aumento de la actividad económica del país: La empresa reportó en el 2023 un salto mayor al 10% en sus ventas.

Los que somos conscientes del ambiente celebramos el crecimiento económico de Costa Rica; sin embargo, no podemos dejar de notar que lo mismo que Recope alegremente vendió 3 millones, 121 mil litros de combustible, con ello también vendió su equivalente en contaminación ambiental. Además una importante parte del aumento de ventas de Recope fue en diésel para la generación de electricidad!

Así es! La próxima vez que usted prepare su café en casa, pensando en todo lo verde, al usar una cocina eléctrica…piense que esa electricidad fue generada por un motor a diésel del tamaño de varios buses exhalando humo negro.

¿Pero qué no éramos un país verde? En los foros internacionales y para los turistas sí. Pero la realidad es muy diferente: todo el año Costa Rica tiene que importar y producir electricidad sucia para satisfacer la demanda doméstica.

Hace unas semanas el ICE anuncio un gasto de 140 millones de dólares para arrendar dos plantas a diésel para generación eléctrica, para suplir la caída en la producción hidroeléctrica causada por el fenómeno climatológico del El Niño.

Nosotros y ustedes entendemos lo que es una sequía. Entendemos que gran parte de la generación eléctrica de Costa Rica proviene de nuestros caudalosos ríos, pero que estos están sufriendo por la falta de lluvias.

Pero ¿Qué acaso sequía -o sea falta de agua- no significa por tanto ausencia de nubes y abundancia de sol? Es decir: falta el agua para generación hidroeléctrica…por tanto sobra el sol para energía solar, ¿Qué no?

Costa Rica adoptó la generación hidroeléctrica por su normal abundancia de agua, que es gratis, pero que ahora escasea.

¿Acaso Costa Rica no debiera aprovechar entonces también su abundancia de sol que también es gratis? Como entonces es que en su lugar hemos decidido adoptar el diésel, que no abunda y mucho menos es gratis, y encima contamina?

Muy sencillo: porque no lo paga el ICE, lo paga usted! El ICE ya advirtió que este año los consumidores de electricidad pagarán un 17% más por su factura de electricidad.  Y a esto se adiciona el aumento de otro 17% que ya se pagó el año pasado.  Es decir casi 35% de aumento en dos años. Ah! Y si el diésel llega a subir de precio más de lo calculado…Usted también pagará más de lo calculado.

Esos 140 millones de dólares que ya se está pagando de su bolsillo, por plantas que diariamente queman diésel para generar electricidad sucia, podrían haberse pagado para una instalación fotovoltaica que genera electricidad solar prácticamente gratis y por décadas por venir.

Pero no es eso solo un simple caso de miopía estratégica.

Los países desarrollados y otros que no lo son como Colombia, no están anunciando plantas diésel para generar electricidad. Lo que están anunciado son proyectos de energía renovable. Pero no así en el “País Verde, el Pura Vida”.

Costa Rica subsidia el gas LP mientras tiene en pie toda una serie de barreras y en general falta de apoyo institucional para todo lo que sea aprovechar la energía solar. 

¿Sabía estimado oyente que usted no puede libremente montar paneles solares en el techo de su casa para su uso personal?

Puede usar su cocina con gas LP subsidiado por el Estado, pero está impedido de usar su cocina eléctrica con energía solar gratis provenientes de sus propios paneles en su propio techo.

Costa Rica no podrá ser una economía moderna, limpia y sobre todo genuinamente verde, mientras su crecimiento económico siga a costa de su medio ambiente.

Y los costarricenses no podrán ser genuinamente libres mientras el Estado les impida disfrutar de su astro sol sin permiso y regulación para generar electricidad para sus necesidades energéticas. 

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