La violencia sexual nunca será culpa de la víctima
La violencia sexual es un tipo de violencia que tiene como fin someter y reducir al mínimo a la o las víctimas hasta convertirlas en un trofeo. Sin embargo, el crimen cometido tiene repercusiones no solo en las víctimas directas, sino en las indirectas, como lo son sus familiares y personas allegadas.
Es por medio de la misma agresión como les muestran a otras personas que no estuvieron presentes y que aparentemente no fueron víctimas, cómo el poder del agresor sexual es ilimitado y las puede alcanzar en cualquier lugar.
Estas historias de terror sobre las violaciones son las que muestran a las que no estuvieron presentes, que existe el peligro constante para las mujeres, consiguiendo reducirlas a cada vez menos espacios, solo por el hecho de ser mujeres.
Es así, como estas agresiones quedan grabadas en la identidad de las mujeres como una forma de amenaza constante, al caminar por una calle, al salir a bailar o ir al bar, a la playa, pero también, si van a la escuela, a la clínica, al trabajo o en sus propios espacios íntimos.
No seamos cómplices de los delincuentes sexuales. NO más impunidad. Las violencias sexuales no se justifican, son un DELITO. Alcemos la voz contra la violencia machista
Este es un mensaje del Sistema Nacional para la Atención y Prevención de la Violencia contra las Mujeres y la Violencia Intrafamiliar y el Instituto Nacional de las Mujeres, INAMU.
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