Las gotas que derraman el vaso
Los costarricenses en un 90% son creyentes en Dios, los valores y en la democracia, instrumentos con los cuales se alcanzó paz social hasta el momento, progreso individual y colectivo, más un nombre a nivel mundial, como ejemplo de democracia, defensora de los derechos humanos y el bienestar de las mayorías, logros que merecen respeto, conservar y reforzar con honestidad y solidaridad de parte de la administración pública actual.
El vaso está a punto de rebalsar, me pregunto, ¿con cuales palabras bonitas diremos?, basta ya de robar las arcas del estado, encubrir la corrupción, a los evasores y promoción de la impunidad, basta de socavar la institución de la familia tal y como la visualiza el 90% de las y los costarricenses, basta de cargar sobre las espaldas de los pobres, los desaciertos administrativos de gobiernos sin misión ni visión que, se han encargado de sumir a Costa Rica en la pobreza y en un subdesarrollo de más de 60 años en infraestructura vial, tramitología, educación y algo fundamental, la modernización y reducción del aparato burocrático.
No es la solución al caos vial, remarcar las paupérrimas vías actuales, cargar con multas a los conductores y saturar de parquímetros los angostos caminos de las principales ciudades, simplemente para sacar del bolsillo del contribuyente dinero para que el estado siga con la fiesta de la inoperancia y la parálisis por análisis. La solución está en construir, como construyen nuestros hermanos países de Centro América que, cuentan y aquí vale el término, con mejores carreteras y autopistas que Costa Rica.
Educación, salida antojadiza que los costarricenses no aprueban, al realizar un convenio con Cuba y dejar abiertas las puertas para que ingrese un régimen totalitario que, atenta contra la idiosincrasia democrática de Costa Rica, el aumento de la pobreza y la concentración del poder y el capital.
¿Pensión a los 70 años?, prácticamente no hay trabajo para el costarricense con una edad de 35 años en adelante, ¿quién ofrece trabajo a un costarricense de 70 años?, sin tomar en cuenta que las condiciones de salud física de una persona de 70 años, nativa de un país de primer mundo, son diferentes a las de personas de un país subdesarrollado. La solución es; honestidad, habilidad administrativa de los recursos y dejar de ver los sistemas de pensiones como cajas chicas.
Lo anterior más violentar el juramento de confesión, impulsar la eutanasia, el aborto, eliminar el espacio del sexo en cédula, son gotas de agua que van a derramar el vaso.
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