Los diez días se perdieron

En octubre de 1582 diez días desaparecieron.

Así como lo escucha esta es la historia de cómo más de una semana nunca existió en la historia

De la noche del 4 de octubre, la humanidad de esa época dio un salto al 15 de octubre. Así, si alguna vez quisiéramos encontrar los sucesos acontecidos el 7 de octubre de 1582, por ejemplo, nos toparíamos con que no hay nada.

¿Qué fue lo que pasó?

Para aquella época se manejaba el calendario juliano, el cual indicaba que un año constaba de 365 días y seis horas, lo cual no era tan exacto.

En realidad, el año se compone de 365 días, 5 horas, 48 ​​minutos y 45 segundos.

Esa diferencia de casi 11 minutos se fue acumulando en el tiempo y, según las autoridades religiosas, implicó un desfase que solo era remediable, suprimiendo diez días.

Fue así como nació el calendario que nos rige en la actualidad, el gregoriano y cómo las personas nacidas entre el 5 y el catorce de octubre de 1584 no tuvieron cumpleaños.

¿Y por qué se eligió precisamente esas fechas para borrarlas del calendario? La iglesia determinó que ese era un buen momento, ya que no chocaba con ninguna celebración religiosa importante.

Otro detalle fue que no todos los países adoptaron al mismo tiempo este cambio, los que tenían una mayoría de fieles denominados “protestantes” se rehusaron al cambio, lo que también provocó un desfase de tiempo muy complicado, hasta que fue aceptada por parte de toda Europa.

El último país en cambiar del calendario juliano al gregoriano fue Grecia, que finalmente hizo un salto de 12 días en marzo de 1924.

Fuente muyinteresante.es