Los sábados dulces en Suecia

En Suecia los sábados son literalmente dulces…

Así es, ese día de la semana es el más esperado por los niños, porque es cuando se les permite comer dulces.

Esta tradición se remonta a la década de los cincuenta, cuando las autoridades se salud recomendaron reservar solo un día de la semana para la ingesta de dulces y así combatir las caries en la población infantil.

Esta recomendación fue aplicada, quedando los días sábados para deleitarse comiendo todo tipo de dulces, la punto de que en ese país esta tradición se denomina literalmente: los dulces sábados.

Pero la tradición de comer dulces solo un día de la semana generó un efecto inesperado, pero muy efectivo entre las familias suecas… el ahorro.

Resulta que, en muchos hogares de ese país, los niños guardan el dinero que le dan sus padres, para gastarlos el sábado, es decir, ahorran durante la semana para comprarse los dulces que quieran o que les alcancen ese día.

Esa práctica ha calado en la población infantil que ve recompensado su ahorro, obteniendo un dulce premio cada semana, y la semillita del ahorro poco a poco va germinando en entre los niños.

Además, es común que los niños suecos tengan lo que se denomina, libertad financiera, es decir, ellos deciden qué hacer con sus ahorros, lo que también les asigna una importante cuota de responsabilidad.

Si bien la tradición de los dulces sábados no es tan estricta como antes y entre semana los niños suecos también disfrutan de confites y chocolates, esta sigue vigente y con resultados muy positivos a nivel de educación financiera, algo que, en 1950, seguro que no se imaginaron.