Más educación, más valores…
No somos pocos los ciudadanos que nos preguntamos: ¿Qué medidas se pueden tomar para mejorar el rumbo de nuestra nación, para fortalecer la paz y la justicia social, para combatir la criminalidad, para tener una educación de vanguardia, mejor infraestructura y más oportunidades para todos?… Entre otros muchos anhelos.
Costa Rica se nos ha escapado de las manos en muchos aspectos; la violencia está al tope y la percepción parece no ser la mejor, porque nos topamos con conflictos, polarización, con escasas oportunidades de un diálogo sincero y racional en busca del bien común, el cual es necesario que nos fijemos como uno de los horizontes principales.
Desde luego que la educación es un pilar fundamental, y lo que en otro momento fue uno de nuestros bastiones, hoy lamentablemente no lo es. Tenemos un profundo rezago entre las generaciones más jóvenes. La pandemia desde luego ha dado un duro golpe al sistema educativo que ya de por sí tenía problemas en nuestra nación. La recuperación no parece fácil.
Se requieren decisiones que apuntalen a una mejoría integral en infraestructura, en factores académicos y en una proyección que alcance a todos los sectores de la sociedad, especialmente aquellos más vulnerables que siempre carecen de opciones integrales y que requieren de una nutrida oferta educativa.
Necesitamos también retomar los valores como la solidaridad, la honestidad, la fraternidad y otros que nos ayuden a hermanar a una sociedad que se ha venido dividiendo con el tiempo.
Costa Rica ha sido un país confiado a la voluntad de Dios, y lamentablemente se ha querido sacar a Dios de nuestra sociedad por parte de algunos grupos o ideologías. Respetamos a quienes no creen en Dios, pero también es justo un respeto y tolerancia a quienes sí lo hacen. Respeto y tolerancia que, por cierto, se han perdido.
Nuestra nación requiere más amor fraterno, abierto a todas las personas de buena voluntad, abierto a buscar el bienestar de los demás, dispuesto a entregarnos y a trabajar por una mejor nación en la cual nadie se quede atrás, ni en la que nadie quiera sacar provecho de los demás.
Ocupamos verdaderos valores para que las personas que ostenten cargos públicos puedan pensar decididamente en servir a la patria. Ocupamos valores para que todos estemos dispuestos a dar lo mejor de nosotros en donde sea que nos encontremos.
Todos anhelamos vivir mejor, pero debemos entender que no estamos solos en la sociedad; que hay ciudadanos, hermanos nuestros, que no la pasan bien. Esforcémonos por una Costa Rica mejor, más educada y con más valores…
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