Nuestro menú post pandemia

Ningún ser humano hubiera imaginado las gravísimas consecuencias que tiene y que tendrá el Covid 19. Esta pandemia que hoy nos remece, tendrá graves efectos en el futuro.

Los retos para enfrentar la post pandemia son gigantescos, pero uno en especial, nos debe llamar la atención: ¿Qué? ¿Cómo? y a ¿Qué costo? pondremos la comida en nuestras mesas.

La Organización de las Naciones Unidas para la alimentación y la Agricultura, FAO, advierte que la pandemia ya está afectando al sector alimentario, urge adoptar medidas inmediatas para garantizar el suministro de alimentos e invita a los países a mitigar las perturbaciones que pongan en riesgo su seguridad alimentaria.

Desarrollar la capacidad de los pequeños agricultores para aumentar la producción de comida será clave, dice la FAO.

El Covid 19, hoy enfrenta a Costa Rica con una realidad largamente ignorada: la pandemia nos sorprende con un sector agrícola seriamente debilitado. Fueron décadas donde imperó la lógica de comprar más barato en otros países, que producir en el nuestro. Irónicamente, las cargas sociales que tanto criticamos y justificaron esas importaciones, son las mismas que hoy salvan vidas y enfrentan el virus desde nuestra seguridad social.

Solo para mencionar algunos ejemplos: del millón de quintales de frijol que consumimos los ticos por año, apenas producimos 150 mil quintales y para abastecernos dependemos de China y de Nicaragua.

Los arroceros, están parecidos. Mientras el Ministro de Agricultura anuncia que promoverá la siembra de 5 mil hectáreas de arroz, suficientes para garantizar el grano por apenas un mes; los productores se ahogan en la falta de una política clara que los estimule a producir la tierra que hoy tienen ociosa.

Hace 30 años dejamos de producir maíz. Este cereal hoy lo importamos de los Estados Unidos para producir los concentrados que engordan el ganado o les permite dar más leche. Y qué decir de los horticultores que por años han enfrentado las reglas del comercio internacional o del contrabando.

Hoy más que nunca, el Consejo Nacional de Producción cobra gran relevancia, hagamos que recupere su roll como la institución estratégica del Estado que administra las políticas de seguridad alimentaria.

El tiempo es nuestro gran reto. Costa Rica tiene la capacidad agropecuaria que demandará la post pandemia, pero para recuperarla ocupamos voluntad y confianza. Comprendemos que la tarea involucra a todos los sectores. Empresas privadas, asociaciones, cooperativas y gobierno. Mujeres y hombres, todos unidos sin olvidar que nuestro reto es el tiempo, solo así evitaremos las indeseables consecuencias para todos, en especial para la población más pobre y vulnerable.