Ocurrencias: Escáneres, reglas fiscales y secretos bancarios
Hace un tiempo atrás, en un debate, representantes del sector intelectual y empresarial, demostramos que el problema que llevó a la contratación de una concesionaria en el muelle de Moín, según un informe de la Contraloría General de la República, fue porque JAPDEVA no llevaba su contabilidad de acuerdo con estándares internacionales. Esto llevó a concesionar al nuevo muelle y como resultado esa concesionaria adquirió escáneres que recientemente detectaron el envío más grande de droga en la historia de Costa Rica.
¿Por qué tanto la administración de Luis Guillermo Solís Rivera como la actual se han rehusado a aceptar los escáneres. ¿Acaso hay algo malo en encontrar embarques con droga? ¿Quién se vería perjudicado por esos hallazgos y que tiene que ver el gobierno con eso? Esa negativa al uso de los escáneres para dar el beneficio de la duda no la puedo calificar más que una ocurrencia.
Agréguese otra probable ocurrencia, cuando el Señor Presidente de La República dijo que aplicar la regla fiscal, tal como lo piden los diputados, sería suicida. Suicida, Señor Presidente, es atacar a la empresa privada la cual genera más del 70% del empleo en el país. Suicida, señor Presidente, son las ocurrencias que llevan a los inversionistas a salir huyendo del país y con ello aumentar el desempleo.
Dentro de las nuevas ocurrencias está también eliminar el secreto bancario, curiosamente, impulsado por los mismos que atacan a la empresa privada, generalizan diciendo que todos los que tengan un auto de lujo son presuntos lavadores de dinero y entonces hay que hurgar en las cuentas de las personas para que paguen impuestos. Olvidan que las primeras en deber dinero al fisco y Caja son las propias instituciones estatales y que la amnistía tributaria las benefició principalmente a ellas.
Bajo el estribillo: “Siempre los mismos, todos corruptos”, Chávez llegó a Venezuela. Tal parece que algunos están empeñados en que Costa Rica sea la próxima Venezuela. Atacaron a diestra y siniestra a la clase política tradicional, se dicen paladines de la ética y terminaron siendo igual o peor que los demás. Costa Rica no necesita de ocurrencias y menos de resentimientos sociales y odios cultivados. Costa Rica necesita de ideas claras, estructuradas, solidaridad y hermandad.
El señor Presidente dice que quien quiera quedarse sentado que se quede, ¿Pero, no es flexibilizar la regla fiscal quedarse sentado? ¿No es echarles la culpa a gobiernos anteriores, quedarse sentado?
Las ocurrencias como las antes señaladas son lo que provocan la constante satanización de la política. Esto ha llevado a que una gran cantidad de personas decentes no quieran nada que ver con la política electoral y que una parte importante de la ciudadanía no vote. Votar es un derecho, pero también una obligación.
Los comentarios están cerrados.