Organizar el país y cuidar la eficiencia y eficacia

Costa Rica requiere para avanzar organizar el aparato estatal y la producción nacional.

Todas las madrugadas, en el Hospital Nacional de Niños, decenas de enfermeras y médicos cuidan a los pequeños pacientes; así como, en el resto de los hospitales de la Caja Costarricense de Seguro Social, evalúan el estado de salud y gravedad de sus pacientes.

Varios oficiales cuidan los ríos y mares, para evitar el ingreso al territorio nacional de narcotraficantes con su mortífera y dañina droga.

Todas las mañanas, en  cuatro mil quinientos centros educativos,  los maestros y profesores, dan inicio a su lecciones. Los choferes,  desde tempranas horas, movilizan a educadores y estudiantes a los centros educativos.

En los distritos y cantones los jardineros  cuidan de los parques. Muy delicadas operaciones de análisis se realizan para una segura distribución del agua. Así como los trabajadores de las empresas de electricidad, que facilitan el acceso a este servicio de vital importancia para los hogares, comercio e industrias.

Todas esas personas son de alguna manera funcionarios públicos, que cuidan la calidad de su trabajo. Es fundamental e importante que cada uno haga cada día sus labores bien realizadas.

Todos  los trabajadores de alguna manera, aunque estemos en la selva profunda o en el cafetal, debemos hacer perfectamente nuestro trabajo. Costa Rica no puede tener trabajadores que hagan mal su trabajo.

La eficiencia y eficacia deben estar presentes en toda actividad laboral, para así lograr mayor competitividad. Los índices de competitividad indican, que nuestro país tiene un alto nival  de  producción de equipo, miden la eficiencia  y eficacia que antes no existía.

Costa Rica tiene un gran potencial para salir adelante pero para ello se requiere de un pacto nacional de todos los grupos políticos y diferentes sectores del conglomerado social, para forjar un diálogo nacional centrado en los mayores intereses.

Necesitamos fortalecer la  formación profesional, la capacitación en cada una de las instituciones públicas, para elevar  el nivel de trabajo, a niveles superiores de mayor competitividad.

Tenemos urgentes  e importantes objetivos nacionales que deben estar por encima de las posiciones partidistas, lo que necesitamos son pactos, acuerdos nacionales, para que así el país retome su senda de diálogo constructivo que otrora permitió lograr acuerdos para beneficio de Costa Rica.