Pareciera que algunas leyes están sólo en el papel

Cuando una entidad del Estado o privada, no está dispuesta a cumplir con las leyes y regulaciones, esto equivaldrá a un incumplimiento normativo, lo que resultaría en un delito o un error civil; situación que no pocas veces se presenta a diario en Costa Rica.
En este siempre muy respetuoso comentario, quiero señalar una delicada situación que se presenta reiteradamente en algunos Bancos, entidades públicas y privadas, en relación al maltrato de personas adultas, y aquellas en situación especial de vulnerabilidad.
En Costa Rica la ley N° 7935 menciona que, las personas adultas mayores tendrán derecho a que se respete su dignidad física, psíquica y moral, este derecho comprende la protección de su imagen, autonomía, pensamiento, dignidad y valores.
La Ley de la persona adulta N° 30490, promueve el servicio de facilitación administrativa preferente, en beneficio de personas adultas y en situación especial de vulnerabilidad. Lamentablemente pareciera que estas leyes no se cumplen como así se indica, peor aún, sin consecuencia alguna.
La ley N° 30840 promueve el servicio de facilitación administrativa preferente en beneficio de personas en situación especial de vulnerabilidad, según cita de los siguientes:
Primero. La presente ley tiene por objetivo promover la aplicación de servicios de facilitación administrativa preferente en beneficio de estas personas.
Segundo. Todas las entidades públicas comprendidas en el artículo 1 del título preliminar de la ley 2744. Ley del procedimiento administrativo general, así como todas las entidades privadas que prestan servicios públicos, implementen de forma progresiva sobre la base de sus recursos y medios disponibles.
El servicio de facilitación administrativa preferente, a través de medios tecnológicos o de atención administrativa domiciliaria, para todos los usuarios que no puedan acceder por sus propios medios a los servicios públicos que requieren. Sin Embargo, con preocupación en algunos casos no se cumplen de estas leyes.
Pareciera que en algunas ocasiones, éstas leyes están sólo en el papel. Es del conocimiento público que, el día de pago de las pensiones, es un día especial para muchos adultos mayores, incluso para muchos es el único paseo del mes, ir al Banco, trágicamente, esa ilusión de retirar su dinero, se convierte en algunos casos en una espera deshumanizante de hasta 3 o 4 horas.
Sí, 3 o 4 horas en la fila “preferencial”, donde un solo funcionario atiende a este grupo de personas, y otros 5 o 6 trabajadores atienden a los demás clientes, lo que da como resultado injusto y discriminatorio que, si atienden a un adulto mayor, en ese mismo lapso de tiempo han atendido en las cajas normales a unas 20 personas.
Indistintamente si es o no es un problema mixto, es una situación inhumana y de extrema desconsideración, hacer esperar tanto tiempo por el servicio, a este indefenso sector de la población, lo que amerita de inmediato una solución urgente.
Los comentarios están cerrados.