Prohibir la extracción de petróleo: Una acción contra el ambiente
El Presidente Alvarado solicitó a la Asamblea Legislativa aprobar el proyecto de Ley 20641: Ley de combustibles para avanzar en la eliminación del uso de combustibles fósiles en Costa Rica y declarar el territorio nacional libre de exploración y explotación de petróleo y gas.
Sin embargo, en el Artículo 10 del Acuerdo de París se estableció:
“Las Partes comparten una visión a largo plazo sobre la importancia de hacer plenamente efectivos el desarrollo y la transferencia de tecnología para mejorar la resiliencia al cambio climático y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero”.
Pues justamente, desde el 29 de noviembre del 2019 se le demostró al Señor Presidente de la República Carlos Alvarado Quesada que la extracción y refinación de petróleo costarricense reduciría las emisiones globales de CO2 en más de 500 mil toneladas métricas al año ya que Costa Rica está en capacidad de extraerlo, transportarlo y refinarlo utilizando electricidad 100% renovable y evitar de esta forma, las miles de toneladas de CO2 que emiten los barcos que nos traen los combustibles que necesitamos cada día, y las toneladas que se emiten en la extracción y refinación de petróleo en Estados Unidos en donde se genera electricidad quemando combustibles fósiles.
Es lamentable por lo tanto, que el Señor Presidente siga insistiendo en querer prohibir para siempre la extracción de petróleo en Costa Rica, provocando que en los próximos 30 años se emitan alrededor de 20 millones de toneladas de CO2, que podrían evitarse si aprovechamos el petróleo que existe en Costa Rica.
También es lamentable que el Señor Presidente no muestre sensibilidad a los problemas fiscales y socioeconómicos que afronta en país y pretenda que, para darle una “lección al mundo”, que Costa Rica renuncie a una riqueza que, a precios actuales, podría representar más de 350 mil millones de dólares y que además, permitiría reducir el precio de las gasolinas en casi 300 colones por litro y generarle al Gobierno alrededor de 3.900 millones de dólares al año, con lo que se podría reducir el déficit fiscal sin recurrir a nuevos impuestos.
La extracción y refinación de petróleo costarricense reducirá las emisiones mundiales de CO2 y además resolvería para siempre los problemas fiscales del país, evitando además el recurrir a nuevos impuestos-
Entonces habría que preguntarse ¿Por qué razón insiste el Señor Presidente de la República en convertir a Costa Rica en el único país del mundo en que su propio presidente le impide a su pueblo el aprovechamiento de recursos naturales?
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