Uso correcto del idioma, 18 de setiembre, 2019
Una de las preguntas de los oyentes tiene que ver con la pertinencia de las expresiones “la calor y el calor”. Don Carlos indica:
“El sustantivo “calor” es ambiguo. En este sentido, valga recordar que los sustantivos ambiguos son aquellos que pueden presentar tanto el artículo masculino como el femenino sin que se dé un cambio en el significado. Por lo cual, se puede decir, de manera correcta, tanto “el calor” como “la calor”. Sin embargo, la utilización de una u otra forma sí permite conocer muchas veces el origen del hablante, su lugar de procedencia, su actividad o profesión… Por ejemplo, en el área metropolitana se utiliza más la forma “el calor”; en cambio en las zonas rurales de nuestro país se utiliza más la forma “la calor”.
Continúa explicando don Carlos que al igual que “el calor” y “la calor”, también son ambiguas las expresiones: “el sartén” y “la sartén”, “el azúcar” y “la azúcar” o “el interrogante” y “la interrogante”. En realidad son invariables ya que el distinto género no comporta ningún cambio de significado.
También nuestros lectores han manifestado su inquietud en cuanto al uso de las palabras “elegido” y “electo”. Al respecto nuestro filólogo indica:
“De primera entrada, ambas palabras pueden emplearse en cualquier caso. Ahora bien, poco a poco se han ido marcando diferencias de uso en las cuales el participio irregular “electo” se usa generalmente cuando se emplea como adjetivo; por ejemplo, al decir: “El director electo asume su cargo el próximo mes”. En cuanto al participio “elegido”, este se usa en los tiempos compuestos de los verbos; por ejemplo: “Los empleados ya han elegido a su nuevo director”.
La última consulta es acerca de la utilización de los términos “manotazo” y “manazo”. Don Carlos indica que ambos términos son utilizados, solo que en el caso de “manazo” su uso es más coloquial.
Muchas gracias al escritor Carlos Díaz Chavarría. Para consultas pueden enviarle un mensaje al 83 26 28 65.
Los comentarios están cerrados.