Voluntariado en los parques nacionales
Costa Rica, un país reconocido mundialmente por su extraordinaria biodiversidad, alberga una riqueza natural sin igual en sus áreas silvestres protegidas. En estos espacios, el país protege una cuarta parte de su extensión terrestre y casi un tercio de su territorio marino, a lo largo de 178.054 kilómetros cuadrados.
Entre las 152 Áreas Silvestres de Conservación que administra el Sistema Nacional de Áreas de Conservación (SINAC), entre los que destacan los 30 parques nacionales Esos territorios, ubicados en las siete provincias del país, resguardan ecosistemas de enorme valor biológico, científico, educativo y turístico tanto nacional como internacional.
Una de las grandes fortalezas que tenemos como país es el trabajo voluntario de cientos de personas para cuidar nuestros parques nacionales desde diferentes aspectos, como los de seguridad, limpieza y educación.
La empresa Florida Ice & Farm ha creado el programa Elegí Ayudar, con el cual, durante este 2024, más de 150 voluntarios, entre colaboradores y accionistas de la empresa, han dedicado 1.200 horas de trabajo en seis parques nacionales distribuidos en las provincias de Cartago, Puntarenas, Alajuela y Guanacaste.
Por ejemplo, en el Parque Nacional Volcán Irazú los voluntarios han trabajado en la pintura de la baranda del cráter y en la limpieza y construcción de una cerca en el sendero del árbol embrujado, ubicado en el sector Prusia.
En el caso del Parque Nacional Carara, santuario de la lapa roja: los voluntarios de Florida Ice & Farm han contribuido al mantenimiento de los senderos y al transporte de piedras, garantizando caminos seguros y accesibles.
Y en el caso del Refugio Nacional Mixto de Vida Silvestre Conchal, se ha brindado apoyo en de formación ambiental facilitando espacios educativos a 36 niños,
Las alianzas público-privadas son esenciales para la protección de nuestros parques nacionales. Combinando recursos y voluntad, esas colaboraciones garantizan la conservación de nuestra biodiversidad y fomentan el turismo sostenible, asegurando que las futuras generaciones disfruten de nuestros tesoros naturales. Juntos, podemos preservar la herencia más importante que podemos legarle a nuestras futuras generaciones: un planeta verde.
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